El conflicto podría hacer descarrilar la candidatura de Ruanda a la F1

      El Congo, país africano, ha echado por tierra los claros planes de su vecina Ruanda de incorporarse al calendario de Fórmula 1. Cuando Kigali, la capital ruandesa, acogió en diciembre la gala de entrega de premios de fin de año de la FIA, su presidente, Paul Kagama, aprovechó la ocasión para formalizar las intenciones del país de convertirse en sede del GP de África. Pero un mes después, un grupo rebelde supuestamente apoyado por Ruanda capturó Goma, ciudad congoleña cercana a la frontera con Ruanda. En respuesta, las Naciones Unidas, afirmando que la violencia ya ha causado miles de muertos, condenó el supuesto apoyo de Ruanda al grupo rebelde llamado M23. La ministra de Asuntos Exteriores del Congo, Therese Kayikwamba Wagner, ha escrito ahora una carta al director ejecutivo de la F1, Stefano Domenicali, declarando que las conversaciones de este deporte con Ruanda son "profundamente preocupantes".

      "Aunque aplaudo el deseo de la Fórmula 1 de albergar un gran premio en África, me pregunto si Ruanda sería la opción que mejor representa a nuestro continente y le insto a que ponga fin a las negociaciones y descarte a Ruanda como posible anfitrión", escribió en la carta.

      "¿Realmente quiere la Fórmula 1 que su marca se vea manchada por una asociación manchada de sangre con Ruanda?" Cuando se le pidió que comentara la carta, un portavoz de la Fórmula 1 dijo que está "siguiendo de cerca" la situación en Ruanda. "Hemos recibido consultas de varios organizadores de todo el mundo que desean albergar una carrera de Fórmula 1 en el futuro", añadió el funcionario de la F1. "Evaluamos cualquier solicitud potencial en detalle y cualquier decisión futura se basa en información completa y en lo que es mejor para el deporte y nuestros valores."