En Zandvoort no esperan un lleno.

      El próximo fin de semana el autódromo de Zandvoort acogerá por penúltima vez el Gran Premio de los Países Bajos, pero la prensa local escribe que las entradas se están vendiendo este año más despacio de lo habitual y parece que no habrá lleno.

      No es de extrañar, pues ver una carrera de Fórmula 1 desde las gradas no es precisamente barato, y si Max Verstappen, que en su país tiene casi el estatus de héroe nacional, no gana, al aficionado holandés medio le resulta mucho más fácil renunciar a ese placer.

      La Fórmula 1 regresó a Zandvoort en 2021, y esa carrera se convirtió de inmediato en uno de los eventos más destacados de la temporada, pero no solo por Max, que entonces iba camino de su primer título. Los organizadores lograron convertir el fin de semana de carrera en un auténtico festival, que dura de jueves a domingo, y en su programa no solo están las propias competiciones, sino también todo tipo de entretenimientos, actuaciones de DJs y artistas populares.

      Sin embargo, a pesar de todo ello, en 2025 la demanda de entradas es claramente menor. Si en los tres primeros Grandes Premios el autódromo físicamente no podía acomodar a todos los que querían asistir y durante los tres días del fin de semana lo visitaron más de 300.000 personas, ya el año pasado las cifras fueron más comedidas: alrededor de 275.000.

      Entonces se explicó que los entrenamientos del viernes habían atraído menos atención del público de lo habitual. Ahora se observa la misma imagen, y por el momento se pueden comprar entradas libremente para cualquier día, incluido el domingo.

      Según un portavoz del autódromo citado por la agencia ANP, «En los primeros años las entradas se agotaban antes que ahora, eso es innegable. Tenemos que trabajar más activamente en su venta. Pero esperamos que en 2026 las gradas estén sin duda llenas hasta la bandera».