Alonso dio una vuelta por Mónaco en un Mercedes muy caro.

      Las estrellas de la Fórmula 1 a veces atraen la atención gracias a los automóviles muy caros de sus colecciones personales. Por ejemplo, a principios de otoño Daniel Ricciardo puso en subasta su hipercoche Aston Martin Valkyrie, y la noticia fue inmediatamente difundida por muchos medios.

      Pero por su grado de singularidad ese coche es difícil de comparar con el vehículo con el que hace unos días Fernando Alonso salió a las calles de Mónaco, cuya pasajera era su novia Melissa Jiménez, madre de su futuro hijo.

      Entre los modelos deportivos de Mercedes hay uno especial, desarrollado en 1997 junto con AMG específicamente para las carreras de resistencia: el Mercedes CLK GTR. Pero hubo también una versión adaptada para las carreteras, y entre 1998 y 1999 se fabricaron apenas 28 ejemplares de ese coche. Por supuesto, uno de ellos está en el museo de la compañía de Stuttgart, y se sabe con certeza que en el garaje del sultán de Brunéi hay nada menos que dos: un coupé y un roadster, además ambos con volante a la derecha.

      La modificación de carretera es conocida por los entendidos en raridades automovilísticas simplemente como Strassnversion; su precio de subasta parte de 9 millones de euros, pero puede alcanzar los 15 millones si se trata del roadster, ya que solo se hicieron seis.

      Alonso paseó en el coupé plateado con la característica combinación de cifras en la matrícula —1414—, porque todo el mundo sabe que en la Fórmula 1 el bicampeón del mundo compite con el número 14.

      Como escribe la prensa española, hubo épocas en las que Fernando intentaba ocultar su colección de coches raros de las miradas curiosas, pero ahora que vive en Mónaco, donde todos están a la vista unos de otros, hacerlo se ha vuelto claramente más difícil.

      En el Mercedes CLK GTR, según la versión, se montaron motores V12 de 6,9 litros o de 7,3 litros que desarrollaban más de 600 CV, y la velocidad máxima de semejante monstruo supera los 320 km/h; la aceleración hasta los 100 km/h es de 3,8 s.

      No hace mucho vieron a Alonso al volante de clásicos de Ferrari como el F40 y el Testarossa, y ahora ha mostrado su hipercoche único de Mercedes. Además, en su colección personal hay al menos tres coches raros de Aston Martin —la Valkyrie, la Valiant y el Vantage DTM—, pero también un Ford GT Holman Moody Heritage Edition. Lo más probable es que esa no sea toda la lista, y el año que viene seguro que se ampliará.