La FIA aclaró la regla de las banderas rojas.

      La FIA tomó medidas para evitar la repetición de la situación que provocó que la clasificación del Gran Premio de Emilia-Romaña en mayo de este año se retrasara más de 25 minutos.

      Ese día Oliver Bearman, de Haas F1, cruzó la línea de meta casi al mismo tiempo que se mostraba la bandera roja. El equipo afirmó que el piloto no pudo ver las banderas rojas que se mostraron en el último momento, por lo que la vuelta debía ser contabilizada. Los comisarios estudiaron la grabación durante mucho tiempo y concluyeron que, en realidad, primero se detuvo la sesión y después el piloto terminó la vuelta, por lo que no la contabilizaron.

      Ahora eso se ha plasmado en un artículo del Código Deportivo Internacional: si un coche cruza la línea de meta tras haberse mostrado la bandera roja, el tiempo de esa vuelta no se contabiliza. El momento de la exhibición se determina a partir de los datos del sistema de cronometraje o, si éste no está disponible, lo confirman el director de carrera, o el secretario del circuito y el cronometrista jefe. Si el tiempo de la vuelta fue registrado después de la primera exhibición de la bandera roja, los comisarios deben eliminarlo.

      Esta norma se aplica a todas las sesiones del fin de semana.