Aston Martin y Glenfiddich volvieron a deleitar a los conocedores del whisky.

      En noviembre del año pasado contamos sobre el inicio de la colaboración entre Aston Martin F1 y Glenfiddich, y entonces el famoso productor escocés de whisky realmente sorprendió al encontrar en sus bodegas un barril de esta bebida que había sido depositado allí en 1959.

      Fue un año emblemático para Aston Martin: esa temporada la compañía británica intentó por primera vez entrar en la Fórmula 1, y su coche DBR1/300, pilotado por Roy Salvadori y Carroll Shelby, ganó las 24 Horas de Le Mans.

      Pero ahora el equipo de Silverstone y la destilería del valle de Speyside han vuelto a alegrar a los aficionados al whisky, esta vez con una versión más asequible del single malt, pero igualmente muy atractiva.

      Los maestros destiladores escoceses han lanzado una edición limitada de Glenfiddich de 16 años en honor a la colaboración a largo plazo con el equipo de Fórmula 1, que desde mediados de la temporada suma puntos con regularidad, principalmente gracias a los esfuerzos de Fernando Alonso.

      Los pocos expertos que ya han podido degustar la bebida, madurada en barricas de roble americano previamente usadas para bourbon, señalan notas frescas frutales, de vainilla y cremosas, además de un final equilibrado.

      Esta versión de Glenfiddich es la primera lanzada en el marco de la colaboración con Aston Martin. En el mercado estadounidense se ofrece a un precio de 75 dólares por botella.